Mr. Músculos

Mr. Músculos
Un àrbol que no se dobla se quiebra fàcilmente
Lao Tse

I
Los hombres más musculosos que conocí a través de fotografías y anuncios de la revista “Mecánica Popular”, que leía cuando era niño, fueron “Charles Atlas” y “Joe Weider”.
Joe Weider ofrecía pesas, barras, mancuernas y fórmulas en polvo de proteicas y carbohidratos para tomárselas como merengadas.
Charles Atlas, pro su parte, anunciaba un curso de tensión dinámica y vendía este método a través de un comix, en el cual un hombre forzudo y abusador al pasar corriendo por la playa al lado de una pareja, lanzaba arena sobre ellos. El agraviado en cuestión, “un alfeñique de cuarenta y cuatro kilos”, tomaba el curso de Charles Atlas y en poco tiempo, ya musculosos, regresaba a la playa y golpeaba al abusador, siendo entonces admirado por todas las mujeres. Esta idea vendía pues se pensaba que bastaba con levantar pesas para hacerse invencible. “Deja que tus músculos se muevan bajo tu piel como ratones debajo de la sábana”, nos decía Charles Atlas.

II
Es un mito que por el sólo hecho de levantar pesas uno pueda pelear bien, así como tampoco es cierto que quien hace ejercicios con pesas se pone lento y torpe; ambos conceptos están equivocados.
El trabajo sistemático con pesas fortalece el cuerpo; la masa muscular sostiene el cuerpo ayudando con esto a los huesos para hacerlo a uno más firme.
Combinando los ejercicios de musculación con las artes marciales logras que los músculos crezcan alargados y no redondos. Ver la musculatura y la agilidad de Bruce Lee o de Jean Claude Van Damme en sus películas nos da un buen ejemplo de artistas que combinan las pesas con las artes marciales y que demuestran que sí es posible unir las dos disciplinas.

III
El maestro Bruce Lee en su libro “El Tao del Jet Kune Do” nos explica la idea principal de esta relación músculos / agilidad.
Él nos dice: “Para ejercer la fuerza con rapidez, el atleta que se está musculando mediante un entrenamiento con pesas, debe estar muy seguro de trabajar simultáneamente con velocidad y flexibilidad combinados con las pesas.
Los altos niveles de fuerza unidos a la resistencia, la flexibilidad y la velocidad adecuada llevan al éxito en la mayoría de los deportes.
En el combate un hombre musculoso sin los atributos anteriores puede resultar como un toro persiguiendo al torero, o como un camión en primera persiguiendo a un conejo”.

IV
Debemos ser de una naturaleza dual: “acero y agua”.
Si estás fuerte puedes resistir con tu cuerpo la embestida de un oponente, con tus brazos puedes bloquear cualquier patada o golpe casi sin sentirlo, puedes aguantar y asimilar el castigo de las patadas y puñetazos reduciendo la eficacia de quien te ataca, puedes aplastar literalmente a tu oponente.
Tu estómago con fuertes abdominales no se verá afectado por la embestida de tu oponente, jamás te “sacarán el aire”.
Pero los músculos tienen que ser largos para que no te “autofrenes” en la explosión del lanzamiento de tus propios golpes, es el equilibrio, la fluidez, el viejo Yin y Yang.
Hay que tener fuerza, pero hay que saber usarla; los toros son fuertes pero prefiero la imagen de los grandes felinos “el león y el tigre”, estos animales dan más claramente la idea de lo que se quiere demostrar.

V
Mi amigo y maestro Daniel Medvedov utiliza la imagen del tigre para establecer esta relación con la fuerza de una manera magistral. Él dice: “El tigre no hace de su fuerza ante nadie, él es uno consigo mismo, pero de una rata, como lo es en el instante de atrapar un venado o un animal más fuerte…”

VI
¿Fuertes abdominales que no se vean afectados por una patada o puñetazos fuertes? Qué difícil es subsistir la barriguita cervecera y los cauchos por unos abdominales fuertes.
El sensei Funakoshi (padre del Karate Do Shotokan) sabia que fortalecer los músculos del estomago era la clave del asunto. “By bringing the stomach muscles to state of perfection, a Karateka is able to control not only the movements of this hands and feet but his breating”
¿El estomago a su estado de perfección? A unos centímetros bajo el ombligo, cuatro dedos debajo del ombligo, ahí se ubica el “hara”, el centro de gravedad, punto de percusión y centro en el que reside la voluntad. Punto en el que se asienta y de que parte la energía (Ki).

VII
Una de las grandes equivocaciones en este asunto de la musculaciones la de pensar que se puede tener grandes músculos en poco tiempo; un cuerpo de fisiculturista para lucir en la playa, ser como Mr. Universo de la noche a la mañana.
Pienso que lo ideal es sentirse bien físicamente, estar a tono muscular y muy saludable, más allá de la apariencia física porque esto es sólo eso: “apariencia”.
El milagro para ser músculos de la noche a la mañana no viene empaquetado en cajitas de productos químicos, sino que está forjado en el concepto del entrenamiento duro unido a sanas prácticas dietéticas.
Otros recurren a implantarse bolsas de siliconas en los bíceps, tríceps y pectorales para aparentar lo que no son. Cuerpos musculosos armados artificialmente, fofos y que no sirven para nada, salvo para aparentar ser fuertes; es como si tuvieran el cuerpo recubierto de tetas (senos). Otros que sí levantan pesas y hacen ejercicios, caen en la trampa de inyectarse esteroides para hacer crecer sus músculos y lograr tener más energía.
Fabricar cuerpos musculosos por poco tiempo gracias a la ayuda milagrosa de los fármacos es un acto irresponsable que causa daño irreparable al organismo.
Es en verdad una gran tontería poner la apariencia física pro encima de la buena salud. El uso de esteroides es en verdad una gran equivocación y quien los use debe de inmediato buscar la asesoría de un médico, ya que el gran peligro está en los efectos colaterales, porque al final de cuenta lo que están inyectándose son “hormonas sintéticas”.
Hay que recordar que inicialmente los esteroides fueron creados y desarrollados para rehabilitar a aquellas personas hospitalizadas que padecían de anemia, artritis, afecciones de los huesos y de la piel.
En todos estos casos cada paciente estaba bajo estricta supervisión médica, y aun así el efecto sobre el hígado siempre fue devastador.
El Dr. Franco Columbu, P.H.D. en nutrición escribe en su libro. La nutrición del culturista (Editorial Hispanoeuropeo, Barcelona, 1991) datos evaluados por el Physician Desk Referente sobre los problemas que puede producir el uso de esteroides.
La lista es un alerta a los más jóvenes y a los no tan jóvenes para no caer en la trampa de estas “inyecciones milagrosas”.

VIII
Contraindicaciones:
Hipersensibilidad; pacientes varones con carcinoma de próstata o de pulmón; carcinoma de mama en algunas mujeres, embarazo, debido a la masculinización del feto; nefrosis de la fase nefrótica de nefritis (problemas del riñón).

Reacciones adversas en los hombres:
Prepubertales: agrandamiento fálico, aumento de la frecuencia de erección.
Postpubertales: inhibición de la función testicular, oligospermia (disminución de los espermatozoides); ginecosmastia (glándulas mamarias anormalmente grandes en el hombre, a veces pueden segregar leche).

Reacciones adversas en las mujeres:
Hirsutismo (crecimiento de vello en el cuerpo), calvicie estilo masculino, voz grave, agrandamiento del clítoris, irregularidades menstruales, masculinización del feto.

Reacciones adversas en ambos sexos:
Aumento de la tensión sanguínea, náuseas, flatulencia, pérdida del apetito, vómitos, escozor de la lengua, aumento o disminución de la libido, acné (especialmente en las mujeres), inhibición de la secreción gonadotropina, ictericia, disfunción del hígado.